Elkarrekin Podemos ha registrado iniciativas en las 3 Juntas Generales y en los ayuntamientos vascos en los que tiene representación para solicitar que las personas sin hogar sigan contando con alojamiento una vez que finalice el estado de alarma
Vitoria-Gasteiz, 11 de mayo de 2020. Los datos recogidos en el “IV Estudio sobre la situación de las personas en situación de exclusión residencial grave en la CAPV”, en lo relativo a personas que viven en la calle, señala que Euskadi, ha sufrido un incremento considerable con respecto a los recuentos realizados en años anteriores. En 2016 fueron 274 personas y en 2018 la cifra ascendió hasta las 430 personas en esta situación.
El Estado de Alarma y la medida generalizada de confinamiento, obligó en su momento a las diferentes Administraciones Públicas a ofertar un alojamiento, o recurso de acogida de carácter temporal a las personas que se encontraban viviendo en la calle. Actualmente se están valorando las diferentes fases de la desescalada y en ningún momento se ha hecho mención a la respuesta que las administraciones públicas darán a estas personas una vez finalice el estado de alarma. Elkarrekin Araba considera que “la respuesta necesariamente ha de pasar de alojamientos de carácter temporal, a espacios residenciales y viviendas de carácter estable, medida que ya está contemplada en la Estrategia Vasca para personas sin hogar 2018-2020. Creemos que para que las medidas que se tomen al respecto sean eficaces, todo ha de coordinarse con el resto de territorios históricos y con los municipios”.
La coalición cree además que ”las respuestas que hasta ahora se han dado para las personas en situación de calle, no han incorporado la perspectiva de género, invisibilizando de esta manera, los casos de violencia machista y sin tener en cuenta el mayor riesgo de victimización que sufren estas mujeres, que hace necesaria la puesta en marcha de respuestas específicas”.
En este contexto, Elkarrekin Araba solicita en su iniciativa la elaboración de un informe en coordinación con los municipios para recabar datos y analizar la realidad del THA en relación a las variaciones que se hayan producido en el colectivo que se encuentra en exclusión residencial como consecuencia de la crisis generada por el COVID, que permita posteriormente diseñar y desarrollar las medidas más adecuadas para hacer frente a la nueva situación.
La coalición en Juntas Generales pide a su vez, la puesta en marcha de los recursos residenciales que sean necesarios destinados a aquellas personas que así lo demanden, con servicios específicos para las mujeres, y que durante el estado de alarma han sido alojadas en dispositivos que una vez finalizado el estado de alarma recuperarán su anterior funcionalidad. En este sentido, Elkarrekin Araba entiende que es fundamental la puesta en marcha de servicios para uso exclusivo de mujeres en situación de exclusión residencial, tal y como se señala en la Estrategia vasca para personas sin hogar 2018-2020.
Por último, la iniciativa recoge también la necesidad de diseñar un procedimiento de actuación para los servicios de atención, que contemple las medidas de seguridad sanitarias adecuadas para afrontar la situación de desescalada y escenario post-confinamiento.